James Abbott McNeill Whistler
James Abbott McNeill Whistler (Lowell, Massachusetts, EE. UU., 11 de julio de 1834 – Londres, 17 de julio de 1903) fue un pintor estadounidense, que vivió sobre todo en Francia e Inglaterra.
Anécdotas
Whitler retratado por William Merritt Chase en 1885. |
En Londres, durante una reunión de personas importantes, una señora le preguntó:
-¿Donde nació usted?
Whistler, respondió que en Lowell, una villa indutrial del estado de Massachusetts, en Estados Unidos.
La señora no pudo reprimir un gritito:
-¡Qué horror! ¿Cómo pudo nacer usted en semejante lugar?
-Muy sencillo, señora -respondió Whistler- Quería estar junto a mi madre en esos momentos.
Grey and Silver Battersea Beach (1863). |
En otra ocasión, una admiradora le comentaba:
-Hoy había a orillas del Támesis, querido Whistler, una bruma deliciosa que me recordó sus cuadros. Fue como si cobrase realidad uno de sus apuntes.
-En efecto -contestó Whistler- poco a poco la naturaleza va entrando en razón.
Autorretrato (1872). |
Un admirador, en esta ocasión masculino, conociendo que Whistler tenía en mucha estima a velázquez, le dijo como halago:
-Realmente, Whistler, solo usted y Velázquez han comprendido el arte.
-¿Por qué mete usted en eso a Velázquez? -fue la ingeniosa respuesta de Whistler.
Harmony in Yellow and Gold The Gold Girl (Connie Gilchrist) (1873). |
Whistler que había concluido el retrato de un rico aristócrata inglés, preguntó al retratado su opinión.
-Hombre, querido Whistler, ¿qué le voy a decir?, pues que no me ha favorecido usted mucho en su cuadro.
-Tiene razón, pero convendrá usted conmigo en que la naturaleza tampoco le ha favorecido a usted demasiado.
At the Piano (1858-1859) |
Debido a problemas legales pasó por momento de gran penuria económica. Esta era su situación cuando una tarde llamaron a la puerta de su estudio. Cuando abrió vio que e trataba de un acreedor. Le hizo pasar y le ofreció una opa de champán.
El hombre se quedó lavado en la misma puerta y mirándolo fijamente le recriminó:
-¿Cómo es posible que pueda usted permitirse recibir a las visitas con champán, si no es capaz de satisfacer sus deudas?
-Ah, no se preocupe -le dijo tranquilamente Whitler- Le aseguro que el champán tampoco lo he pagado.
Symphony in White no 1 (The White Girl) (1862). |
En una ocasión hizo un retrato a un magnate de la industria inglesa y le pidió cien guineas por la obra. El retratado no quiso pagar y el asunto paso a los tribunales. Ante el juez el retratado adujo:
-No creo que sea justo pagar cien guineas por un retrato en el que el señor Whistler empleo solo tres horas.
-¿Es eso cierto? -preguntó el juez a Whistler.
-No, señoría -respondió el pintor-; emplee cincuenta y cuatro años y tres horas.
El juez dio la razón a Whistler.
Portrait of Whistler with Hat (1858). |
Como habrán comprobado, Whistler, además de ser un gran pintor, poseía un ingenio a la altura de Oscar Wilde.